Desarrollan la primera pastilla que previene el sarampión
El objetivo de erradicar el sarampión puede que ahora esté un poco más cerca. Científicos de la Universidad de Georgia (Estados Unidos) y del Instituto Paul-Ehrlich de Alemania han probado con éxito el primer fármaco oral que bloquea la propagación del virus del sarampión y podría utilizarse en poblaciones que no han sido vacunadas o cuando la inmunización ha fallado.
«Si se confirman los resultados, será la mayor contribución a la erradicación de la enfermedad», asegura Richard Plemper, profesor de la Universidad de Georgia y uno de los científicos implicados en el descubrimiento.
El medicamento, un nuevo antiviral, se puede convertir en una herramienta clave para frenar la aparición de brotes y resolver los problemas de la vacunación. Con él se podrá tratar a las personas sin inmunizar que caigan enfermos y proteger a aquéllos que hayan estado cerca de los infectados y puedan caer enfermos.
El sarampión es muy contagioso y se propaga con la facilidad de la gripe o el catarro común, por eso son tan frecuentes los brotes. Basta con estornudar o toser para que los virus se propaguen por el aire en pequeñas gotitas de saliva. Es tan contagioso que cualquier niño que esté expuesto a él y no esté vacunado enfermará con toda seguridad.
Eficaz en dos semanas
Pero existe una ventana de tiempo de dos semanas, desde que se entra en contacto con el virus y hasta que aparecen los síntomas típicos del sarampión (manchas en la piel, fiebre, goteo nasal...), en el que se puede cortar la infección. El nuevo antiviral lo hace interfiriendo con la capacidad del virus para replicarse y hacer copias de sí mismo.
Probado en hurones
La «pastilla» del sarampión es aún un fármaco experimental (ERDRP-0519), sin nombre comercial que, de momento, solo ha sido probado en hurones. A estos animales, un modelo utilizado para estudio enfermedades virales como la gripe, se les inoculó un virus letal similar al sarampión. No pudo utilizarse el mismo virus porque el sarampión solo es una enfermedad humana. El tratamiento empezó tres días después y logró erradicar por completo la infección, según se detalla en la revista «Science Translational Medicine». Todos los animales sobrevivieron y desarrollaron inmunidad frente al virus. Ahora el siguiente paso es probar el medicamento en monos y después hacerlo con pacientes de verdad, una prueba que aún llevará años hacerla.
«No sustituye a la vacuna»
Si funciona, se convertirá en una herramienta más para sumar a la vacuna. «No sustituirá a la vacuna del sarampión», aclara Plemper. En su opinión, las vacunas son todavía el mejor escudo protector y confía en que el desarrollo de este medicamento no anime a más padres a dejar de inmunizar a sus hijos. Sí podría ser una alternativa, en los países sin acceso a personal sanitario o con problemas para conservar en frío las vacunas.